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Se nota que el colegio San Agustín tiene una gran tradición baloncestística. Aquí se respira un espectacular ambiente de basket. Un año más, las gradas del pabellón estaban rebosadas de seguidores ansiosos por presenciar una tarde agradable de buen baloncesto. Con la iniciativa de que se disputaran el partido femenino y masculino simultáneamente, los aficionados debían estar atentos para no perderse ningún detalle de lo que ocurriese en cada campo.

El partido de las chicas comenzó unos minutos antes, no sin que antes pudiéramos observar el peculiar baile que las locales tienen como ritual antes de cada partido. Los primeros compases del encuentro se caracterizaron por las imprecisiones en los dos lados de la cancha. Marta Serrano conseguía los primeros puntos para las chicas del San Agustín, gracias a sendas penetraciones a canasta. Las visitantes trataban de apoyarse en su mujer franquicia, Adriana Belmonte, una jugadora muy polivalente, y con gran facilidad para robar balones en defensa. Un triple de Marta Fernández ponía el 7-0 en el electrónico y obligaba al entrenador del Patrocinio San José, a pedir tiempo muerto. Sin embargo, la sangría de puntos continuaba, ya que Marta Serrano continuaba imponiendo su ley en la pintura y anotando canastas de todos los colores. La defensa de las locales asfixiaba a las chicas del Patrocinio, que a duras penas conseguían lanzar a canasta en sus ataques. El final del primer cuarto reflejaba la superioridad de las chicas del “San Agus”: 20-2. La única canasta visitante la anotó Belmonte.

Las chicas del Patrocinio eran conscientes de que tenían que cambiar de estrategia si querían llevarse la victoria. Por ello, el entrenador visitante impuso una presión a toda cancha después de cada canasta. Por momentos, parecía que la remontada era posible, pero el Patrocinio no tenía su mejor día en la línea de tiros libres. Hasta seis lanzamientos de ocho intentos desde la línea del 4,60 fallaron las chicas visitantes en este cuarto. Por parte local, Ana Barragán dirigía con maestría a sus compañeras, demostraba un gran carácter en defensa y anotaba desde fuera cuando las cosas parecían torcerse. La capitana local entraba una y otra vez a canasta, forzando faltas y anotando puntos con una asombrosa facilidad, como si se tratara de la mismísima Amaya Valdemoro. Las chicas del Patrocinio continuaban sin anotar y se marcharon al vestuario al finalizar el segundo cuarto con menos de diez puntos en su casillero (34-6).

La segunda parte fue un calco de la primera. Las visitantes ponían mucho ímpetu en cada acción, pero se mostraban impotentes ante la evidente superioridad del San Agustín. Carmen Lozano se esforzaba en ambas zonas para recortar diferencias. La jugadora del Patrocinio estuvo secundada en este cuarto por su compañera Gómez, una base experta en robos de balones y entradas a canasta. Rocío de la Fuente, una escolta con una muñeca prodigiosa, conseguía siete puntos para el San Agustín, incluido un gran triple, que distanciaba aún más a las locales en el marcador al final del tercer cuarto (53-20).

El cuarto período demostró el coraje y la lucha de las chicas del Patrocinio, que a pesar de ir muy lejos en el marcador, lucharon hasta el último balón para recortar la desventaja. Las visitantes se apoyaban en Belmonte y en Lozano, y elaboraban buenas jugadas, pero no lograban anotar. En este cuarto, la jugadora del Patrocinio Gómez dio un auténtico recital de robos de balón que permitió a las visitantes anotar con más facilidad. Marta Fernández anotaba los últimos cuatro puntos para las chicas de Imanol García, que a este paso, va a ser el primer entrenador en ganar la copa colegial como jugador y entrenador.

Ana Barragán, mejor jugadora AND1 del partido, lo confirmaba al finalizar el choque: “Esta victoria ha sido un trabajo de todo el equipo. Es la primera vez que pasamos de primera ronda y queremos aprovecharlo. Intentaremos llegar lejos y vamos a por todas”. Por su parte, Adriana Belmonte, que juega actualmente en el San Agustín, reconocía la superioridad visitante y se abrazaba con Barragán, ya que es su compañera de equipo. “Ellas han sido muy superiores. No ha sido fácil jugar contra las que son mis compañeras en la cancha cada semana”. Las chicas del San Agustín van en serio. Quieren ganar la Copa Colegial y son una de las favoritas para lograrlo.

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