Copa Colegial ABC 2009

No cabe un alfiler en el famoso Jurassic Park, el hogar de los Raptors de Liceo Sorolla que hoy ha sido invadido por centenares de aficionados provenientes de muchísimos puntos de la Comunidad de Madrid. Se celebra el esperado McDonald’s All Star Colegial ABC y nadie se lo quiere perder. Nunca mejor dicho lo de “se celebra” porque en los minutos anteriores al partido el pabellón es un fiesta: con las gradas repletas, la bulliciosa afición se distribuye por todos los rincones del pabellón mientras disfruta con el espectáculo de las famosas animadoras de Liceo Sorolla, bien secundadas por Ronald McDonald y Rap, la carismática mascota local.

En la presentación de los equipos percibimos de manera notoria lo que ya sabíamos: la constelación de estrellas que se va a desplegar en la cancha es apabullante. Se avecina un apasionante choque entre las Conferencias Este y Oeste, pero no sólo se trata de ganar, ya que con semejantes figuras el espectáculo está asegurado. Tras la ovación del público y los pertinentes saludos, comienza el show.

Arranca el primer cuarto con las chicas en pista, algo estáticas quizá por no haber jugado nunca juntas, lo que provoca que los primeros puntos tarden en llegar. Es Elena Sicilia la que fuerza dos tiros libres e inaugura el marcador. Inmediatamente después, las jugadoras del Oeste sorprenden a sus rivales colocándose en presión en todo el campo. Parece que han salido más despiertas, ya que consiguen un par de robos de balón que rematan con un bonito triple de Ana Juan. Este 0-5 de salida enciende a las chicas del Este, que no pueden permitirse conceder más ventaja. El partido empieza a coger ritmo, y superados los titubeos iniciales, el juego ya fluye a gran velocidad. Se nota que las grandes jugadoras no necesitan mucho tiempo para entenderse entre ellas.

El Este no tarda en engancharse al encuentro y cada vez juegan con más decisión. Una valiente entrada de Sandra Fernández se salda con tiros libres a su favor, consiguiendo el empate. Pero el Oeste no va a permitir que sus rivales se vengan arriba y vuelven a abrir hueco gracias a Cintia del Amo, flamante Mejor Jugadora AND1 de la Copa Colegial. Se mantiene la férrea presión en toda la cancha de las chicas del Oeste, que consiguen forzar ocho segundos sin pasar de medio campo. No obstante, en la siguiente jugada, el Este demuestra que ha aprendido la lección y se escabulle de la trampa, anotando en rápida transición.

A lo largo de todo el cuarto se van produciendo constantes alternativas de liderazgo en el marcador sin que ninguno de los dos equipos consiga dejar atrás al otro. Es baloncesto en estado puro, y en esas aparece Andrea García, la eléctrica jugadora de Cabrini, mostrando su clase pasándose el balón por la espalda mientras marca los pasos, en una jugada que arranca exclamaciones de admiración en la grada. Final de cuarto con el Este sólo un punto por encima, el listón está alto para los chicos, tanto en espectáculo como en intensidad. Mientras se preparan para saltar a la cancha se hace entrega de los premios a los mejores adivinos del torneo, los ganadores de la Copa Fantástica ABC, con el patrocinio de la revista Basket Life.

El segundo cuarto se inicia con una fulgurante penetración de Iñaki Maestro, un canastón que deja claro por qué ha sido pieza clave en la consecución del Estandarte por parte de Joyfe. Maestro está crecido y pronto intenta repetir la jugada, pero esta vez le estaban esperando: se eleva bien arriba para dejar el balón en el aro… ¡pero más arriba llega Daniel Sanromán que le coloca un gorro de impresión! El poderoso jugador de Liceo Sorolla juega en casa y desde luego ha dejado el pabellón local bien alto, para entusiasmo de sus seguidores, que jalean la acción.

En el otro aro, Alejandro Maroto está haciendo mucho daño al poste bajo y consigue una canasta con adicional que vuelve a poner al Oeste por encima. Poco les dura la alegría, ya que emerge la figura de un inmenso Daniel Pariente. El alero de San José del Parque clava un triple espectacular desde la esquina y poco después anota tras rebote ofensivo, dejando claro que va a ser un referente para su equipo tanto cerca como lejos del aro. Se mantiene la tónica de igualdad y nadie cede ni un milímetro, tanto que en los siguientes minutos se viven situaciones de tremenda lucha, con jugadores de ambos equipos lanzándose por los suelos en busca del balón. Habrá quien piense que en All Star el resultado es lo de menos, pero los jugadores están demostrando que los grandes sólo salen a la pista para pelear por la victoria.

Parece evidente que cada equipo ha elegido sus propias armas, ya que mientras el Este amenaza constantemente desde el perímetro, el Oeste se confía una y otra vez a los movimientos de sus pívots bajo tableros. Esta última estrategia parece ser más efectiva, y consiguen un parcial de 0-8. El Este ha pasado en dos minutos de verse cuatro arriba a estar cuatro abajo, y se hace necesario un tiempo muerto. Tras el minuto, un inspirado Roberto Gallego les insufla un poco de aire con una increíble finta en la zona que hace volar ¡a tres defensores a la vez! para después anotar cómodamente. Su equipo ha reajustado la defensa y cuando Miguel Ángel Calleja se lanza en contraataque parece que van a empatar el partido de nuevo. Pero sólo lo parece, ya que al base de Joyfe se le hace repentinamente de noche cuando detrás de él aparece de nuevo la apabullante figura de Daniel Sanromán, colocando un tapón brutal contra tablero que hace temblar los cimientos del pabellón. Los aficionados locales enloquecen ante la exhibición del jugador de Liceo Sorolla como indomable guardián de su aro, y no es para menos. ¡Qué bestia!

Al descanso se llega con 19-23 y todo por decidir. Pero en el All Star Colegial no hay un segundo de respiro y es el momento del Concurso de Triples. Las muñecas más finas de la Copa enfrentadas en una competición de altísimo nivel. El público observa con emoción las series de lanzamientos mientras se van contando los puntos. No es fácil mantenerse frío con tantos ojos pendientes de ti y sin estar en situación de partido, pero eso no parece afectar a Elena Sicilia y Santiago Silva, cuyas excelsas series de tiro les convierten en merecidísimos campeones. Estos jugadores de cabeza fría y muñeca caliente han demostrado tener la mirilla más ajustada que nadie. Donde ponen el ojo ponen la bola y la afición se lo reconoce con una ovación cerrada. Ronald McDonald les hace entrega de sus trofeos y las animadoras se encargan de que el ambiente festivo se mantenga hasta que se reanude el juego. Por supuesto, lo consiguen.

Máxima igualdad
El tercer cuarto de nuevo nos trae a las chicas a la pista, y una veloz bandeja de Marina Alguacil es el pistoletazo de salida. La respuesta llega rápida con una canasta de Elena Arranz, que impone su ley en ambos tableros cogiendo incluso sus propios rebotes si es necesario. La pívot de San José del Parque acabará siendo la máxima anotadora del partido, probando una vez más que con ella en el equipo se puede ir al fin del mundo: nunca te falla. El nivel es altísimo en las dos mitades de la cancha, hay muchas estrellas dando lo mejor de sí mismas y las canastas espectaculares se suceden. En el momento de mayor ritmo del partido, Elena Martín anota dos puntos con un tremendo rectificado en el aire, en una preciosa jugada que está al alcance de muy pocas. Inspirada por la acción de su compañera le llega el turno a Irene Álvarez, que se reivindica con un tremendo misil desde 6’25 que dedica efusivamente a la grada. No es para menos, el partido está caliente y por fin el Este ha conseguido volver a ponerse por delante en el marcador.

Ninguno de los dos equipos puede permitirse levantar el pie del acelerador y los cambios se suceden para que no decaiga la intensidad. La entrada en cancha de Andrea García es recibida con cánticos coreando su nombre, y también ha entrado Elena Sicilia, que nunca pasa desapercibida y anota en transición. En estos momentos se producen las mejores acciones del equipo del Oeste, ya que las chicas saben que dentro de pocos minutos su tiempo habrá acabado y echan el resto. Ningún ejemplo mejor que el de Marina Alguacil, que se erige en estandarte de un conjunto que recupera su orgullo a pasos agigantados. La valiente base del Estudio se va hacia el aro con determinación jugándose el tipo, recibe varios golpes, el árbitro señala falta, ella acaba en el suelo, y el balón… ¡dentro! No se sabe cómo, consigue un 2+1 absolutamente increíble entrando hasta la cocina que hace creer al Oeste en la victoria. Tanto es así que de nuevo se animan a colocar su temible defensa presionante en todo el campo, pero el Este no se achanta y pelea con uñas y dientes cada posesión.
Las canastas se venden carísimas y en mitad del huracán asistimos a un duelo en la cumbre (nunca mejor dicho) con un emparejamiento Arranz-Del Amo que echa chispas. Entramos en los últimos tres minutos de cuarto y Ana Juan da un golpe de autoridad con una dificilísima “bomba” desde la línea de fondo que coloca al Oeste cinco arriba. La jugadora de San Agustín quiere el partido e inmediatamente roba el balón y se va hacia el aro, pero se topa con los largos brazos de Sandra Fernández, que le coloca un gran tapón. Es el enésimo del partido, ¡estamos viendo boinas de todos los colores!

Las chicas del Este no quieren descolgarse y el buen trabajo de la sempiterna Elena Arranz las mantiene con vida. Pero una vez más, Marina Alguacil entra como quiere hasta la cocina, se prepara un bocadillo y se apunta dos tantos más. En los últimos segundos la posesión es para el Este, que se enfrenta a la asfixiante presión rival. Las dificultades para abrirse paso provocan un par de pases malos, el balón rueda por el suelo varias veces y todas se lanzan a por él como si valiese el partido. En mitad del caos emerge Raquel Serrano que encuentra el camino al aro entre el bosque de defensoras… y anota sobre la bocina dejando el marcador en 35-39. ¡El Este no se rinde!

El Oeste remata la faena
La papeleta final queda en manos de los chicos que van a tener que esforzarse a fondo para no desmerecer el gran espectáculo brindado por sus compañeras. El Oeste afronta el último cuarto con cuatro puntos de ventaja… ¡que pronto se convierten en ocho gracias a un inmenso José Luis Sanz! El arranque del pívot de Salesianos Soto es de una superioridad insultante: desde cerca, desde lejos…no perdona en ninguna circunstancia. Cuando decide relajarse, el partido ya está 45-37 y la victoria parece que comienza a mirar hacia el Oeste. No está dispuesto a permitirlo Iñaki Maestro, que roba un balón y se lanza hacia el aro contrario, y finta la entrada engañando a todo el pabellón y a su defensor, que le cae encima espectacularmente. Todo queda en un susto, pero Maestro no consigue anotar los tiros libres, ejemplificando los problemas de su equipo para culminar con éxito una buena serie de acciones defensivas.

Sólo quedan cinco minutos de partido y el Oeste gana por siete puntos. Un golpe ahora podría ser definitivo y eso lo entiende bien Santiago Nistal. El alero de Retamar encara el aro y salta con tremenda fe buscando un hueco entre los pívots rivales donde no parece haberlo. Su osadía parece destinada al fracaso, pero consigue mantenerse en el aire y ¡vuela para anotar a aro pasado! “Air” Nistal se ha quedado suspendido durante una eternidad, dejando a los espectadores boquiabiertos. Esa impresionante acción ha podido ser la estocada definitiva. El Este queda muy tocado y pide un tiempo muerto para intentar un último asalto heroico.

En la reanudación, Miguel Ángel Calleja da esperanzas a su equipo culminando un contraataque, pero el Oeste está muy bien plantado en el campo y el poderoso Daniel Sanromán se hace con un importante rebote de ataque que convierte en canasta. Impresionante partido el de este "backboard cleaner”, al que nadie puede toser bajo los aros. El tiempo vuela, los triples del Este no encuentran la red, y una buena penetración de Ramón Bergua lleva la diferencia hasta los diez puntos, la máxima del partido. Apenas hay tiempo para más y el Oeste ata en corto el partido hasta el bocinazo final que les proclama como merecidos vencedores del McDonald’s All Star Colegial 2009.

Entrega de trofeos
La ceremonia final dirigida por Pablo Carabias, Director de la Copa Colegial y con Ronald McDonald de invitado de honor, fue el cierre a una gran jornada de baloncesto.

En primer lugar, tuvo la palabra el sensacional base ex profesional Pablo Martínez Arroyo que a estas alturas no necesita presentación, y que recordó que esta mágica competición va a seguir celebrándose durante muchos años más, despidiéndose con un ilusionante “volvemos el año que viene”. A continuación tomo el micrófono Alberto López, presidente de la Asociación de Baloncesto Colegial, que quiso agradecer su implicación a los todos colegios que forman parte de la Asociación, teniendo también palabras de elogio para los entregados aficionados.

Se procedió después a la entrega de medallas, seguida de la elección de los Mejores Jugadores AND1 del encuentro. Por las chicas, recayó en Elena Sicilia, un justo premio a su impresionante temporada en la cual se ha convertido en una auténtica referencia en la Copa Colegial. El premio se suma al conseguido en el concurso de triples, y es que lo de esta chica está fuera de lo normal. Y en chicos fue para José Luis Sanz. En un partido en el que todos los jugadores del Oeste fueron una piña, Sanz apareció en el momento decisivo rompiendo el partido con seis puntos seguidos que fueron definitivos. Un reconocimiento merecido para quien fuera el máximo anotador de su equipo en la gran final de la Copa Colegial, en la que hubo de conformarse con el subcampeonato.

Como broche final se procedió a posar para una completa y emotiva “foto de familia”, tras de la cual los jugadores y jugadoras se abrazaron, rieron y celebraron con emoción apenas contenida el final de la Competición. Fue quizá en esos momentos cuando se pudo apreciar la verdadera grandeza de la Copa Colegial: chicos y chicas orgullosos de haberlo dado todo, emocionados por el honor de haber representado a su colegio y dando una lección de compañerismo mostrando los lazos establecidos van más allá de lo deportivo. Y a su alrededor, una afición feliz y entregada, que guardará siempre en la retina los espectaculares momentos de gran baloncesto que han presenciado. ¿Acaso se puede pedir algo más? Bueno sí, una sola cosa:

¡¡Que llegue pronto la temporada que viene!!