Seguimos creciendo a velocidad de crucero. La Copa Colegial está en su mejor momento, con récord de escuelas y equipos prácticamente en todas las sedes y con baloncesto colegial por doquier día tras día en Barcelona, Vitoria, Madrid, Sevilla, Zaragoza, A Coruña, Valladolid, Málaga y Valencia. Esto ya no hay quien lo pare y hay que mirar a futuro, como bien dice nuestro director nacional, Álvaro Herranz. Es por eso que, desde Barcelona, nos hemos impregnado de este mensaje y hemos creado nuestro propio proyecto 2030, con una visión a largo plazo, pero con mucha confianza. El futuro es hoy, pero también es el mañana, así que el proyecto 2030 consiste en esto: realizar las actividades de hoy lo mejor posible, pero siempre pensando en el recorrido que puede tener la mejor competición escolar de Europa en los próximos años.
Lo mejor de todo es que a la Copa Colegial no le vemos límites. Todo lo que la Copa se propone, se consigue. Si algo parece imposible o irrealizable, se acaba haciendo por la fe, el entusiasmo y las ganas que le ponemos todos y cada uno de los miembros del equipo. El navío colegial avanza a velocidades despampanantes, a muchos nudos, y parece que solo la propia Copa puede parar a la propia Copa. Fijándonos en Barcelona, por ejemplo, la agenda 2030 significa muchas cosas, pero sobre todo una: llegar a más colegios. Haber metido a 50 equipos más que la pasada edición ha sido todo un éxito, pero ya pensamos en 2025 y una estratosférica cantidad de equipos, sobre todo de fuera de Barcelona. Antaño, la ciudad de Barcelona fue la que vio crecer el formato, y por eso hay que cuidarla, aunque conviene no olvidar que el 40% de los equipos en la actualidad son de fuera de la ciudad condal. El área metropolitana de BCN está ganando peso, especialmente con Badalona y L'Hospitalet, pero otras urbes como Sant Cugat del Vallès o Esplugues empiezan a ser piezas clave para el engranaje barcelonés. Y para rematarlo, tenemos a Manresa, una localidad que cae a una hora en coche de la capital de Catalunya, pero que ha hecho un esfuerzo presentando a 3 escuelas y 5 equipos en el prestigioso torneo. Vamos a más, queremos más, y por eso, vamos a seguir pisando el acelerador.
Nuestra brújula, el proyecto 2030; nuestra felicidad, la ilusión de los colegios; nuestra meta, la expansión colegial sin parangón, como las supernovas.
