Todo y más sobre la final masculina que se jugará este viernes en Marina Besós. Aguado buscará el 11-0 y un doblete histórico y Riera confía en su principal baza, Mario López
Analizada ya la primera final de la Copa Colegial Barcelona, pasamos hoy a ver qué tal pinta la masculina. Badalonès y Sant Gabriel Sant Adrià serán las escuelas protagonistas del duelazo que se disputará en el pabellón de Marina Besós una vez acabada la final femenina. Será sobre las 18h45 y tendrá en la pista a todas las estrellas de los dos colegios protagonistas.
Badalonès, a rematar la faena
Los campeones de 2014 llegarán con toda la artillería a la cita clave. Liderados por Mario López durante todo el campeonato, la duda reside en si los jugadores de La Penya tendrán permiso, como lo tuvieron en semifinales, para jugar la final.
Badalonès es un experto en remontadas: en dos de sus tres partidos tuvo que remontar distancias cercanas a los diez puntos. En primera ronda se vio abocado a un -11 contra Aula, pero cuando caía por 36-25 ante una escuela sin fondo de armario, el técnico de los ‘Dimonis’ cargó de responsabilidad a Mario López y logró voltear el choque superando a Aula por 63-79. En cuartos de final tuvieron quizás un partido más plácido contra Bon Soleil (90-50), aunque Iker Garmendia les puso en aprietos en la primera mitad. Y en semifinales sudaron de lo lindo teniendo que remontar de nuevo 9 tantos de diferencia ante los siempre combativos lobos claretianos (49-42). Ahora, en esta final, no les queda otra que aprender de la lección: empezar fuertes y no dormirse en los laureles… si llegan por delante en el tercer cuarto, es muy probable que maten el partido cuando SantGa menos se lo espere.
Sant Gabriel: Aguado buscará un doblete histórico
Ganó la Copa Colegial 2019 con las chicas y pretende repetir en 2022 con los chicos. Lo de David Aguado es otro nivel: lleva 10 victorias consecutivas y ya es conocido -además de por su magnífico SEAT Cupra- por ser “El Imbatible” de la Copa Colegial. No se le conocen deshechas en la Copa, de ahí su apodo.
Además, este está siendo un gran torneo para los suyos. Su trayectoria es impecable y de la mano de Pol Ríos y Dídac Rodríguez han barrido a tres equipos de Badalona e irán a por el cuarto. En primera ronda se merendaron a Maristes Champagnat (80-36), en octavos triunfaron en un apretado final ante THAU (49-54), en cuartos mandaron a casa a Isaac Albéniz (67-50) y en semifinales hicieron su mejor partido ganando en casa de La Llauna (44-52). La Plana de Badalona fue testigo de cómo Aguado sigue siendo literalmente invencible. Acompañado en el banquillo por su camarada Marc Ríos -hermano de Pol-, ¿será capaz de colocarse 11-0 en la Copa Colegial y ser el primer coach que levanta el estandarte con el equipo masculino y con el femenino?
El duelo: López VS Ríos
Ambas escuadras tienen jugadores muy talentosos, pero si tenemos que quedarnos con alguien estos son Mario López y Pol Ríos.
Mario -más conocido como ‘El Hombre de Yeti’ o ‘SuperLópez’- ha maravillado a todos los presentes en cada uno de los choques. Máximo anotador (26’7 ptos/p) y máximo reboteador (17 reb/p) de la competición, tiene encaminado el MVP del torneo. Ya ha sido el best player en dos de los cruces, pero ahora deberá demostrar por qué Badalonès se merece ganar el estandarte. No obstante, delante tendrá otro portento: Pol Ríos. Segundo máximo anotador, tercer máximo reboteador y cuarto máximo asistente, Ríos ha sido decisivo en todos y cada uno de los enfrentamientos: promedia 23’5 puntos, 8 rebotes y 1’8 asistencias por partido. Unos números que lo avalan para, perfectamente, dar un golpe encima de la mesa y llevarse la final.
Las apuestas: Badalonès 55%-45% Sant Gabriel
Se espera un gran duelo en el que cualquier de los dos coles pueda imponerse y apuntarse plaza en L’Alqueria de Valencia. Sin embargo, Badalonès llega como favorito. Por poco, pero como favorito: muchas cosas tendrán que mejorar, pero si la lógica se impone, los jugadores de Badalonès tienen un pelín más de calidad. La clave estará en si veremos el Badalonès de las primeras partes (que claramente si el partido se jugase a 16 minutos no estaría en la final) o si veremos el Badalonès de las segundas mitades. Si los ‘Dimonis’ ofrecen esta segunda versión, tienen las de ganar.
