El penúltimo equipo que nos falta por analizar es Quatre Cantons. Situado en el barrio del Poblenou, este colegio ya había jugado una vez la Copa Colegial, pero ahora han vuelto seis años después dispuestos a dar mucha guerra. Se apuntaron los últimos de todos, prácticamente fuera de plazo, y demostraron con el paso de los partidos que son muy peligrosos. Y son muy peligrosos porque creen mucho. Creen en sí mismos y creen en la Copa Colegial, y así lo han demostrado en todos los choques, resolviéndolos todos por la mínima, siendo los MATAGIGANTES de la competición.
En primera ronda no partían como favoritos contra Bon Soleil, pero sacaron el partido adelante en casa tras la disputa de ¡dos prórrogas!. Sudaron la gota gorda y les quedó claro que las bengalas estaban prohibidas en la Copa, por lo que el 65-59 les permitió pasar a las siguientes fases, donde demostrarían que son responsables. Ni una bengala desde entonces y muchos buenos momentos, como el recuerdo que se llevarán en el recuerdo de haber derrotado ni más ni menos que a los flamantes campeones colegiales de España por tan solo un punto. Quatre Cantons se impuso a Sant Gabriel en octavos (67-68) y se impulsó hasta los cuartos donde, aun y no partir como favoritos, vencieron a Sant Ignasi, un clásico colegial, por 40-38. Han tenido tres contiendas igualadísimas y pretenden que las semis no sean así. Robert Pascual quiere imponerse fácil al PIFMA Team, pero esto es solo un sueño. Si quieren estar en la final deberán ponerse el mono de trabajo en las semis: quien gane el cruce hará historia colándose en su primera final de la Copa Colegial.
Su punto fuerte: la afición
Quatre Cantons es un pedazo de cole que tiene un pedazo de afición. Liderados por Billy, los cantoneses estarán muy probablemente en los premios All-Star a mejor afición, pero antes deberán demostrar una vez más su valía este jueves contra Santa Pau-PIFMA. Se espera un desplazamiento multitudinario al pabellón del Turó de la Peira y un duelo de aficiones súper sano entre dos de las escuelas que más nos están sorprendiendo. En Instagram, 4 Cantons está muy activo y se les ve enchufadísimos para el match... ¡Nos encanta! Ojalá monten un buen tinglado colegial este jueves.
Su punto débil: la altura
Quatre Cantons es cuatro centímetros más bajo de media que el PIFMA Team. Parece poco, pero son muchos centímetros. Sus 181 centímetros contrastan con los 185 de los de Virrei Amat y esto les puede pasar factura en los rebotes. Además, podríamos añadirle a los puntos débiles la inexperiencia en estas rondas finales, pero jugarán contra un inexperto, por lo que ambos vivirán la presión de una semi de la Copa Colegial. Quizás la excesiva dependencia de Gerard Miralles también es otra flaqueza de los lilas, comparada con la amalgama de jugadores que pueden decantar el partido en el PIFMA Team.
Quatre Cantons, en números
