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7 de Febrero de 2024. Colegio vedruna immaculada barcelona
Primera Ronda Masculino
FINALIZADO
Los 1/32 de final de la Copa Colegial Barcelona están que arden. Decimosexto día de competición y ya se han jugado 45 partidos de la mejor competición colegial de Europa, seis de ellos en un supermiércoles que pasará a la historia por ser uno de los días con más dolores de cabeza para la organización del torneo. Pero esto no importa porque para Vedruna Immaculada y Agora hoy era uno de los días más felices de sus vidas: había partido de Copa. Como muchas veces que juegan fuera de casa, el colegio internacional de Sant Cugat había fletado un bus para transportar a su afición... ¡y menudo bus! Todo de hinchas agorenses, acompañados de los jugadores, de padres y madres, y de Marcos López, responsable de Copa Colegial del cole, se habían acercado a uno de los pabellones, probablemente, más apretados de la competición. Por delante tenían una tarea nunca fácil: sortear las trampas que le tenía preparado el rival, así como frenar la euforia local, que ya sabe lo que es ganar en 2024 tras hacerlo hace un par de semanas en su debut contra Anna Gironella Mundet. Y para conseguir este importante triunfo que daba acceso al sorteo de 2ª ronda, Agora se presentaba con Hermilo Pereira Nunes, más conocido como Milo, uno de los entrenadores top de la pasada edición, que este año repetía, pero en chicos en vez de en chicas. Mito del Joventut de Badalona en sus tiempos mozos, hoy sentaría cátedra en Vedruna.
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Ahora sí, a jugar. La primera acción sería significativa. Robo de balón prematuro de Verdruna Immaculada y Agora que ya se tenía que poner tapones en las orejas. Y es que aunque no hubiera tanta gente como en el partido de 1ª ronda, este es, sin duda, el pabellón más bullicioso de la Copa Colegial. Caldereta pura y dura, mejor que las de langosta. Y si a eso le añadimos que los locales celebraban cada rebote como si fuera un buzzerbeater, realmente daba miedo enfrentarse a los de azul celeste. Una pasada. El choque, en el minuto 3, ya estaba en su apogeo, como nuestro querido Sol en sus mejores momentos. A estas horas apenas recibíamos la luminosidad de nuestra estrella madre, pero a ninguna de las dos escuadras le hacía falta para animarse y envalentonarse en el envite. Por parte de Agora destacaba Santi D'Aquino, mientras que en los anfitriones quien daba el callo era Miquel Palau, que se erigía más majestuoso bajo aros que el Palacio de la Moncloa. Si este lo preside Pedro Sánchez, el pívot vedrunense, con sus 190 cms de altura, hacía lo mismo con el palacio que es esta escuela de l'Eixample. Muy top Palau, que intentaba frenar como podía las acciones de un ahora inspirado Marc Codina. Agora estaba por delante, aunque no con rotunda comodidad, como pretendían al principio. Santi le decía "aquí no" a su defensor y el coach Adrià Espiés -hermano de dos de sus pupilos- se veía obligado a pedir un timeout más que necesario tras otear de reojo el 3-9. Agora enfilaba el primer cuarto, aun y la arenga de Milo. Y es que el míster visitante es tan top que podría decirse que es el Carletto del basket. Da gusto oírlo, es pura música para los oídos... como música era lo que harian después Eric Gandol y Tao Zhu marcando un parcial de 0-21 para acabar 5-27. Los de Sant Cugat estaban dando un recital: en vez del Madrid City de Ana Mena esto era el Agora City. Alucinante: 5-27 al término del primer cuarto.
Vedruna Immaculada tiene muchas cosas buenas. Más allá de su entrenador top y sus tácticas, aunque estuvieran perdiendo abultadamente, ni la afición ni los jugadores se venían abajo. Las animadoras, con relucientes pompones más típicos de las cheerleaders de American School que de una escuela debutante en Copa, le ponían color al pabellón, condimentados por pancartas con un dibujo de una Copa que ni Pablo Picasso. Excelente la hinchada celeste, que seguía repicando el tambor para contrarrestar la estridente bocina de Agora, que sonaba cada dos por tres, ya que los del Vallès metían encestes a cascoporro, como quien tira sal a la sopa. El tanteo, prácticamente a la media parte, indicaba un +29 visitante que, aún, no sacaba una sonrisa a Milo. Siempre tiene cosas a mejorar y de ello se haría cargo en el entretiempo. Vedruna lo tendría jodido por eso: 11-52. Irremontable.
"Somos la leche con Colacao" o "Zipi Zape, Vedruna al ataque; Mortadelo y Filemón, Immaculada campeón" eran solo algunos de los cánticos que oiríamos en los ocho minutos de descanso. Espíritu de luchadores, igual que una madre de una chica de Pàlcam, que con todo el derecho del mundo se acercaba a la organización y reclamaba una repesca femenina. Tiene toda la razón, pero le hemos explicado que la cuadratura de los números no da y que el año que viene 100% -como dice nuestro apreciado Coach iAndrey- que habrá repechaje. A la vuelta del enfrentamiento, más ruido, más emoción a flor de piel y más espíritu colegial made in Vedruna. En el tapete, eso sí, poco más que añadir: veintipico puntos de Gandol, otra decena de Ontiveros... y el marcador que seguía disparándose (26-77). Vedruna, en vez de venirse abajo, no se rendía y Jan Sierra, Víctor Pineda y Santi Falcón, entre otros, alentaban a los suyos desde el banquillo. Demostraban que los valores están por encima del resultado, erigiéndose con un corazón grandioso, que es lo que hay que ponerle a la vida (además de "sabor", como dice Pepe Rodríguez de Masterchef en todos y cada uno de los programas del talent culinario más duro del mundo).Ver esta publicación en Instagram
Aunque para duro este torneo de Copa Colegial, que nunca da gato por liebre y que, aunque algunos partidos sean de peras a uvas, se viven como la velada del año de Ibai. Son una pasada y esto estaban dispuestos a disfrutarlo los players de ambas escuadras. El Team Milo no tenía problemas para resolver fácil y seguir propulsando a jugadorazos top como los juniors de 2º año Codina y Gandol, dos piezas clave en el engranaje de la Copa 2023 que le estaban funcionando muy bien al técnico luso. El último cuarto no serviría para mucho, sino para ver como Agora se convertía en el tercer equipo tras Joaquim Blume y 4 Cantons en llegar a la centena de tantos para completar un luminoso perfecto para ellos: 30-100. Agora, así, presentaba candidatura al estandarte 2024. Su pega: que tiene un equipo corto con solo 8 jugadores. Su fuerte: que tiene un entrenador como la copa de un pino. Presentarán batalla, seguro: "aquí y ahora, Agora está de moda", como diría Rebeca Pous en su mítico anuncio de Aldi.
Vedruna Immaculada no se iba de brazos vacíos. Su MVP Marc Palau disfrutaría de una entrevista única, sería aplaudido por sus compas y confirmaría que sí, que estarán en la multitudinaria repesca de este viernes. Se viene...
Marc Palau (Vedruna Immaculada) y Eric Gandol (Agora International School) fueron elegidos MVP's Santalucía del partido.