¿Se acuerdan de 2014? Ese año sucedieron muchas cosas. Por ejemplo, la “guerra civil” de Ucrania, el fin del bloqueo a Cuba, la guerra de precios del petróleo o el Mundial de Baloncesto Masculino en España. Pues bien, en esa temporada, Mirabal alcanzó las semifinales del torneo en la mejor competición escolar de Europa, siendo eliminados por el a la postre campeón Estudio.

Con el recuerdo de lo vivido hace casi una década, buscan repetir, o quizás superar la hazaña en 2023. De momento, ya están en los 1/8 de final, (dónde se enfrentarán a Estudiantes las Tablas), y lo harán con el impulso de haber sumado dos triunfos hasta ahora en lo que va de Copa Colegial 2023.

Eso sí, ante un rival que dejó el honor de la Copa en un nivel muy alto, como fue Retamar. Los de Pozuelo de Alarcón retaron a los jugadores de Pablo Llorente con un partido en el que quizás no brillaron los ataques, pero sí lo hicieron, y mucho las defensas, (sobre todo, los visitantes en la primera mitad). Retamar tan sólo sumó 8 puntos en esos primeros 16 minutos de encuentro. Únicamente, Javier Martín, Beltrán Orue y Jerónimo Ruiz encontraron el camino del aro ante un equipo que se marchó poco a poco en el marcador, y que con un triple de David Trevejo, poner el 8-20 en el electrónico.

Retamar tenía que reaccionar. Cambiando la dinámica defensiva, en el ecuador del tercer período estaban cerca de los 10 de desventaja (13-25). El arranque de carácter ofensivo de Jerónimo Ruiz daría esperanza a la afición del cuadro local, en un choque que cerraría el acierto desde el perímetro de ambos equipos desde el citado lanzamiento exterior de Trevejo.

De hecho, entre los dos equipos sólo anotaron ese triple en el choque, dentro de una segunda mitad que no se tradujo tampoco en una oda en lo ofensivo, pero con muy buena intensidad defensiva de los dos roster. Dentro de esa maquiavélica estructura detrás de Retamar y Mirabal, Pedro Espinal y Fernando Rivero, en los visitantes, dieron el paso. Entre los dos, se establecieron como estandartes de su escuela, para anotar cerca del 50% de los puntos de su equipo entre ambos, y ser capitales en el avance a la siguiente fase del conjunto entrenado por Pablo Llorente por 20 tantos de diferencia (26-46).

Ahora, a Mirabal le llega el más difícil, que es conseguir, de nuevo como foráneo, un triunfo que sería de un legado que no olvidaría, ante uno de los campeones de la Copa Colegial. Escolapios Pozuelo venció a Veritas en la última jornada, en un partido sensacional y que se decidió en los últimos instantes.

Los jugadores entrando por Pablo Ardila buscan un título que ya consiguieron a la vuelta de la pandemia (2021), y que anteriormente se les había resistido jugando la final de 2019 ante Estudio. Pues bien, antes tendrán que pasar la prueba de un Mirabal con muy buenas maneras, con solidez y en el que todos van a una buscando un rato el estandarte colegial. Por su parte, Retamar sigue acumulando buenos momentos en la Copa, y creciendo año a año en el torneo. ¡Nos vemos el año que viene!