La selección española sub-19 de baloncesto conquistaba este pasado domingo el Mundial masculino disputado en Debrecen (Hungría), gracias a su victoria, en la prórroga, por 73-69 ante Francia, un hito histórico que vuelve a llevar a lo más alto del panorama mundial a nuestro baloncesto. Y, entre los campeones, encontramos a tres jugadores con pasado en la Copa Colegial: Sergio de Larrea, Alejandro Moreno y Lucas Langarita.

Sergio de Larrea disputó la competición colegial en la sede Valladolid con su colegio, San Agustín, en el año 2020, con solamente 15 años. Disputó un partido, ante Lourdes, en el que los Espartanos cayeron de forma épica por un solo punto de diferencia. Sergio fue elegido MVP Wibo del partido con una espectacular estadística en su haber: 17 puntos, 10 rebotes y 26 de valoración. El base pucelano pasó de su colegio a Valencia Basket, donde milita actualmente, habiendo debutado ya en ACB. En la final, Sergio de Larrea anotó dos puntos, tras un excelente rendimiento durante el torneo.

Alejandro Moreno disputó la Pequecopa 2016 con Romareda Rinos, resultando campeón de una competición en la que su equipo venció en la final ante  Leones Marianistas. Alex, que va a dejar este verano su ciudad para jugar en Alemania, en el Kickc Ibam de Münich, pertenece a una familia que lleva la Copa Colegial en el corazón. No en vano sus dos hermanos pequeños Adrián y Álvaro, han jugado con los Rinos la edición de esta temporada y, a buen seguro, repetirán en 2024 buscando superar las semifinales en las que cayeron eliminados el pasado 10 de marzo. Aunque Álex Moreno solamente estuvo en la pista 17 segundos en la final ante Francia, ha ofrecido un gran rendimiento a lo largo de todo el torneo, en el que ha participado en los siete encuentros disputados por la selección.

Por su parte, Lucas Langarita, que también ha debutado ya en ACB con Casademont Zaragoza, estuvo inscrito con el equipo de su colegio, los Dragones Británico, en la edición de 2022 de la Copa Colegial Zaragoza en la que, pese a que Langarita no llegó a jugar ni un solo minuto, fue integrante de la plantilla que consiguió la mejor clasificación de la historia para su colegio, que llegó hasta la semifinales. En la final ante los galos, Langarita disputó 10 minutos, en los que sumó un rebote, una asistencia y dos recuperaciones de balón, habiendo jugado los siete partidos del torneo.