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Han sido los mejores jugadores de sus equipos en los partidos de la pasada semana y, gracias a esas victorias, Jesús y María y Apostolado ya ven de cerca la Gran Final de la Copa Colegial Valladolid 2017. María Escribano y Álvaro Rodríguez ya tienen un reconocimiento individual que, por supuesto, quieren rematar con un reconocimiento grupal.
María Escribano, en su segunda participación en la Copa Colegial, cuajó un excelente encuentro frente a Lourdes en el partido de octavos de final del pasado viernes. Alcanzó los 17 puntos, 13 rebotes y 2 asistencias, números espectaculares que fueron decisivos para alcanzar los cuartos. Además, ya en su primera experiencia, en 2016, dejó muy buen sabor de boca en su encuentro frente a Apostolado. En aquel entonces, María no pudo pasar de ronda pero, ya en 2017, junto con sus compañeras de los Truenos, va de cabeza a la Gran Final. Con unas medias de 11,5 puntos, 13,5 rebotes y 1 asistencia, María Escribano ya es, por derecho propio, una de las pívots más dominantes y decisivas de la Copa Colegial Valladolid.
Por si parte, si hablamos de Álvaro Rodríguez estamos haciéndolo de un histórico de la Copa. Ha participado en todas las ediciones, desde 2014, año en el que pudo saborear el subcampeonato de los Habana Tigers. Los últimos dos años, pese a tener un equipo muy prometedor, Apostolado no ha alcanzado las cotas a las que aspiraba y ha sido esta campaña cuando, a nivel global, el conjunto ha explotado. Apoyados en la amplia experiencia de Alan Morchón, el liderazgo en la pista de Álvaro se dejó sentir en el duelo ante Jesús y María. Anotó cuando tuvo que anotar y dirigir cuando tuvo que dirigir. Definición absoluta de figura y, como decíamos antes, liderazgo.
Tanto María Escribano como Álvaro Rodríguez va a jugar más partidos de la Copa Colegial Valladolid y están convencidos de que, a finales de marzo, estarán luchando por alzarse con el estandarte de campeones.
Redacción. Hace 2 meses
Sergi Àlex. Hace 4 meses
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