Lourdes y San Agustín acogerán dos partidos cada uno en una jornada que vivirá duelos de alto voltaje, además de poder ver, por primera vez este año, a los espartanos de San Agustín, campeones en 2016.

Comenzando por el colegio de Lourdes, tendremos a las 18:45 un duelo de octavos de final entre dos conjuntos que, sin estar dentro del grupo de favoritos, parten con posibilidades de alcanzar las semifinales. Las Águilas, como locales, se enfrentarán a las Truenos de Jesús y María buscando repetir el gran papel de 2016, cuando se quedaron a las puertas de la Gran Fina. Por su parte, Jesús y María participa en su segunda edición de la Copa Colegial con el claro anhelo de dar un paso más y superar la fase de cuartos del año anterior. Se da la casualidad de que, en 2016, ambos equipos fueron eliminados por el subcampeón, Apostolado.

En el segundo turno, a las 20:15 de la tarde, repite el colegio Jesús y María, debutante este curso, contra los Habana Tigers de Apostolado. Este duelo se presenta como una incógnita, si bien los celestes siempre han estado entre los favoritos a todo, los Truenos van a presentar batalla con una de las plantillas más compensadas físicamente de la competición. Apostolado, que ya llegó a la final en 2014 y a la semifinal en 2015, sufrió un duro revés la campaña anterior, cayendo en cuartos ante El Pilar y quiere desquitarse cuanto antes. Por su parte, Jesús y María debuta en la Copa Colegial Valladolid y sólo hay una palabra que puede definir sus objetivos: ilusión. Al igual que el conjunto femenino, afronta el año 2017 con ganas de demostrar que son un equipo competitivo y que pueden hacer frente a cualquiera.

Nos trasladamos al Colegio San Agustín, donde las Espartanas tendrán un hueso duro de roer en Apostolado. Es cierto que la trayectoria femenina de San Agustín ha sido un tanto irregular, pero es igualmente cierto que ya en 2015 llegaron a semifinales y, por qué no, esa puede ser una meta muy apetecible. Pero, enfrente, las Habana Tigers no lo pondrán fácil. Las celestes, campeonas en 2015, siempre han sido un equipo competitivo y, tras perder la final el año pasado, las ganas de revancha inundan sus mentes. Es importante recordar que, el equipo ganador de este partido tendrá que jugar dos días después, el 28 de febrero, en horario de mañana, frente a La Salle.

Para finalizar, abran paso a los campeones. Los Espartanos de San Agustín reciben a Ave María por un puesto en la semifinal. Con un bloque casi calcado al que les hizo campeones en 2016, los objetivos de San Agustín no son otros que ganar y llegar a la Gran Final. Enfrente, las Hormigas de Ave María que, siempre compitiendo y siempre dando la cara, aspiran a llegar a semifinales por la puerta grande. Mimbres tienen para ello y, lo que está meridianamente claro, es que este partido promete ser uno de los más apasionantes de la jornada.