Jorge Sáenz, jugador de Mendebaldea, ha disputado este 2020 por primera vez la Copa Colegial. Por su edad, no podrá repetir en la próxima edición, pero nos cuenta sus impresiones sobre su participación y cómo ha pasado estos meses tan extraños que nos ha tocado vivir sin poder practicar el deporte que más nos gusta a todos: el baloncesto.

¿Cómo has vivido estos meses sin baloncesto?

La verdad es que llevo una rutina un poco mala desde que no puedo pisar la pista de baloncesto, saliendo a correr con los amigos pero echando mucho de menos el balón.

La Play tampoco se te da mal, porque en la Copa Colegial eSports, llegaste lejos jugando al NBA2K…

Sí, me tocó un grupo difícil, con gente que conocía ya de haber jugado en liga y en Copa Colegial y les gané a unos con un marcador más apretado y otros bien, pero luego ya tuve que jugar contra un chico de Galicia y allí ya, me ganó, la cosa se complicó bastante en cuanto pasé la primera fase… En casa estuve con la Play al principio del confinamiento, pero luego ya me cansó y, en cuanto pude salir de casa, empecé a correr, aunque a mis padres seguro que les habría gustado más que me hubiese dado por la lectura.

¿Cómo te defines como jugador en la pista?

Me gusta darme con todos, está bien meter puntos, pero los rebotes hay que ganarlos y me motivo mucho cuando me toca un rival más alto, trato siempre de superarme.

Tu colegio aún está vivo en la Copa Colegial 2020, de hecho clasificados para semifinales, donde tenéis un rival muy complicado, Lakua, que ha sido la revelación de esta edición. A la espera de saber si se puede reanudar la competición, ¿cómo ves vuestras posibilidades de cara a lograr el Estandarte?

En cuartos de final nos enfrentamos contra un equipo algo superior, como es Marianistas, que tiene bastante historia, ha llegado a finales de la Copa Colegial y el año pasado fue semifinalista, les plantamos cara y ganamos. Lakua es un equipo que tiene poca experiencia en el baloncesto y debuta en la Copa, pero ha demostrado grandes cosas hasta ahora. Es un colegio que está situado cerca de Mendebaldea, por lo que tenemos una rivalidad sana y sería un partido con mucha expectativa y seguro que con gran ambiente en todos los sentidos.

Cuéntanos algo más sobre esa rivalidad…

En Vitoria hay rivalidad entre los colegios públicos y los concertados. En este caso somos públicos ambos, nos llevamos bien y no hay conflictos de ningún tipo. En el otro cuadro están Egibide y Olabide, dos equipos que dan también mucha guerra, unos fueron campeones en 2019 y tal vez Egibide era el favorito para ganar este año, en mi opinión.

¿Para cerrar… qué es la Copa Colegial para ti?

Es mi primer y único año para jugarla. Yo estaba antes en un equipo pero esto ha sido diferente, partidos muy bonitos, especiales e intensos que vivimos con mucha ilusión, jugando con tus compañeros de colegio.