Mirabal y Jesús Maestro abrieron una nueva edición de la Copa Colegial en el municipio de Boadilla, ambos con unas ganas feroces de llevarse el encuentro. El ambiente no podía ser mejor para esta inauguración, una grada llena de aficionados por parte de los dos equipos y unas jugadoras y cuerpo técnicos entregados y con hambre de darlo todo en la competición un año más. Todo auguraba un gran primer partido.

Primer cuarto. Igualdad en la cancha para ambos equipos.

El partido comenzó un salto inicial muy reñido, en el que Jesús Maestro consiguió finalmente hacerse con la posesión. Las chicas de Mirabal hicieron gala de un juego muy vertical y directo dirigido desde atrás por Lucía Vega, mientras que las de Jesús Maestro arrancaban los vítores de la grada con posesiones horizontales y técnicas bajo el mando de Isabel Jurado. A pesar de esto, costó abrir el marcador, y no fue hasta pasados dos minutos cuando Raquel García forzó una falta de Zoe Idahosa, para después encestar un tiro libre, estrenando así el luminoso. Este volvió a quedarse quieto hasta otros dos minutos más en los que la lucha por la posesión del balón se hizo eléctrica. Los intentos se sucedían en ambas canastas, tanto de dos como de tres puntos, y los cambios en los banquillos daban frescura al partido. La local Lucía Vega seguía haciendo gala de sus pases en profundidad diagonales habilitando a sus compañeras bajo la canasta. En el equipo verde, el atrevimiento de Zoe Idahosa se contagiaba al resto de las jugadoras, como María Herreros, que se atrevía de todas las maneras frente al aro. El cuarto terminó con un ajustado 06-07.

Segundo cuarto. Demostración de baloncesto que hace ponerse en pie a la grada.

El segundo cuarto empezó con una sucesión de juego rápido y elaborado por parte tanto del equipo local como del visitante. Rebotes, contragolpes y jugadas explosivas se sucedieron para poner a la grada de pie, saboreando el palpitante devenir del partido. Al contrario que en el primer cuarto, el marcador durante este segundo periodo no paró en ningún momento de aumentar, con una maravillosa actuación de Teresa Arribas (8 puntos, 2 rebotes defensivos) y su asistente favorita Pilar Poza, por parte del equipo madrileño, a pesar de la férrea defensa de Mirabal encabezada por la pívot Eva Fernández. El ataque del equipo de Boadilla estuvo muy repartido, con un juego global y táctico muy marcado que permitió a duras penas la remontada a falta de un minuto para el descanso con un robo a mitad de pista de Elena Gallego y una jugada en solitario que consiguió arrancar un grito de incredulidad a todos los asistentes. Llegamos al descanso 21-19.

Tercer cuarto. La verticalidad se impone al juego horizontal.

Este cuarto comenzó tan eléctrico como acabó el anterior, con nada más y nada menos que 3 triples seguidos por parte de las locales (Lucía Vega (1), Sara Lombart (2)), y dos intentos de las visitantes que no acabaron dentro de la canasta. El juego vertical del Mirabal pareció ser más efectivo que las largas y horizontales posesiones de Jesús Maestro dirigidas por la impecable Isabel Maestro, que permitía al equipo seguir siendo fiel a su estilo de juego consiguiendo muchas oportunidades, pero sin acierto frente al aro. Mirabal no dudó ni por un segundo en aprovechar estas imprecisiones de su rival en campo atacante, con una actuación de manual de la local Sara Lombart, que hizo las delicias de la afición con un repertorio casi inagotable de detalles técnicos. El tercer cuarto terminó con un 30-23.

Cuarto cuarto. Un final de película para un partido apasionante.

Casi sin darse cuenta de que el último cuarto había empezado, Raquel García marcó un triple que hizo que tanto banquillos como grada quedaron enmudecidos, haciendo que el marcador visitante subiera tres puntos y se acercara a su rival. La charla de la entrenadora de Jesús Maestro antes de comenzar este último cuarto pareció hacer efecto en sus jugadoras, que se mostraron duras en defensa y ágiles y rápidas en las transiciones al ataque. Teresa Arribas, de Jesús Maestro, pareció hacerse dueña y señora de la zona bajo el aro, adueñándose de todos los rebotes defensivos. Sin embargo, las locales no bajaron los brazos y siguieron con su incesante ataque en las manos de Sara Lombart y Raquel García. El partido fue llegando poco a poco a su final, sin perder la intensidad ni por un segundo que lo había dominado. Cuando sonó la bocina, un 38-31 lucía en el marcador del colegio Mirabal en Boadilla.

Por su actuación, fueron elegidas jugadoras del partido Eva Fernández por parte del Mirabal, y Zoe Idahosa por parte del Jesús Maestro.