Un año más, llega la March Madness y con ella la locura colegial se acentúa con los cruces de octavos de final. El sorteo deparó un cruce de altos vuelos entre un clásico de la Copa Colegial como es el colegio San Agustín, frente a un debutante en estas lides, San Ignacio de Loyola, que, en su estreno en el torneo, había arrasado sin paliativos a Bernadette. Por su parte, las locales venían de vencer en segunda ronda -no sin sufrimiento- a Patrocinio San José.

Inicio igualado

Las chicas de San Agustín salieron como motos, con sendas canastas en la pintura de Miriam Abejón y Clara Almeida. Rápidamente respondió la visitante Yadira Illan, con un triple contra tabla. Parecía que ambos equipos se habían estudiado a la perfección, porque el ritmo de juego brillaba por su ausencia.

Con todo, cada uno utilizaba sus armas: San Ignacio de Loyola lanzaba sin dudar desde más allá de 6,75, mientras que San Agustín obtenía frutos de cada pick and roll finalizado con maestría por Miriam Abejón. En el ecuador del primer cuarto (10-6), Quique García-Lisón, coach visitante, pidió un tiempo muerto para ajustar la defensa de sus pupilas.

Despegue local

Miriam Abejón culminó su gran cuarto -siete puntos-, sumándose asimismo a la fiesta su compañera Martina Paz, con siete puntos casi consecutivos, cinco de ellos tras dos grandes robos de balón en transición. Al final del periodo inicial, la renta para las locales era más que interesante (21-8).

Las chicas de San Ignacio de Loyola salieron a morder al inicio del segundo acto y en apenas ocho segundos ya lograron su primer 2+1, obra de Mencía Gómez. En defensa, las visitantes apostaron por una zona 1-3-1 para tratar de incomodar los ataques de San Agustín. El problema es que las locales continuaron moviendo el balón con paciencia e inteligencia, logrando varias canastas debajo del aro.

Apagón verde

Con una intensidad digna de elogio, las jugadoras de San Ignacio de Loyola conseguían robar varios balones, ahora bien, con escaso éxito anotador. Enfrente la dirección de Laura Villegas rompía a cualquier defensora que se le pusiera por delante y los rebotes y brega de Miriam Abejón, seguían dando réditos a las locales.

Un triple frontal de Paloma Baillo ponía la máxima en el marcador (32-13) y contra las cuerdas a las verdes, quienes se aferraban a seguir defendiendo y a una presión asfixiante a toda pista. Tres tiros libres, una canasta de media distancia de Claudia Herráez y una sobre la bocina de Yadira Illan dieron algo de oxígeno a San Ignacio de Loyola, que llegó al descanso en su mejor momento del partido (36-19).

Misma tónica

Tras el paso por el túnel de vestuarios, como era de prever, las chicas de San Ignacio de Loyola metieron la directa, lideradas por las hermanas Illan (Nayade y Yadira). Pero enseguida las jugadoras de San Agustín se pusieron serias, a los mandos de Laura Villegas en ataque, las finalizaciones al poste de Miriam Abejón y con una zona press a toda cancha, perfectamente diseñada por su entrenadora Alicia Fernández.

Mencía Gómez trataba de tirar del carro de San Ignacio de Loyola, secundada por Marta del Hoyo. El problema es que San Agustín no bajaba un ápice su intensidad, con la MVP Miriam Abejón sumando en casi todos los ataques -18 puntos al final del choque-.

Orgullo verde

Con el partido visto para sentencia (53-29), en el último cuarto, ambos colegios continuaron a tope sin mirar el electrónico. Ahí las chicas de San Ignacio de Loyola demostraron un orgullo verde al más puro estilo Boston Celtics. Aunque su inferioridad física era evidente, pelearon cada balón como si fuera el último. Por su parte, San Agustín tuvo en las Claras (Almeida y López) a las protagonistas en los minutos finales, con varias acciones en ataque dignas de elogio.

Con el pitido final, las chicas de San Ignacio de Loyola dieron la mano a sus rivales reconociendo su superioridad. En su debut, abandonan la Copa Colegial 2024 tristes, pero orgullosas del esfuerzo realizado. Mientras, San Agustín accede a cuartos de final, con una premisa clara: están a tres pasos de volver a alcanzar la gloria. Mimbres tienen para ello. Seguiremos informando…