¿No tienes usuario?
Crónica: Sergio García-Muñoz Alva
Fotos: Gabriel Montero
30 Enero, 2020
Pocas veces un miércoles de Copa Colegial tuvo tanto significado como el del choque que cerraba la primera ronda del torneo en Madrid. Dos conjuntos que por una u otra razón regresaban a la mejor competición escolar de Europa se veían las caras en un escenario idílico y ante un público que nada más salir del cole se iba a volcar con el colegio local.
Era la escuela Newman, que tendría como rival a otro equipo que no iba a venir sólo. Montpellier no tenía la intención de estar de paso en la competición, y lo demostró con un señor partido en el que siempre fue por delante y que se acabaría apuntado por 48-60, aunque con tramos de mucha (pero qué mucha) igualdad.
También hubo alternancia, pero anotadora, entre los dos genios de ambos equipos, que cuajaron un soberbio encuentro: Diego Guijarro (Newman) y Carlos Crespo (Montpellier) estuvieron, directamente, sublimes. Pero el base foráneo apareció en el momento clave, y desniveló definitivamente un encuentro que honra a lo grande los valores de un torneo único.
Primer cuarto; ¡vaya salida visitante!
El arranque no fue al uso en la Copa Colegial: lo primero por lo legendario del comienzo, con el homenaje al gran Kobe Bryant con las dos primeras posesiones gastados. Y después, porque los nervios no estaban presentes, ya que los primeros cuatros intentos (dos por cada bando) acabaron dentro del aro. Por los locales, hablamos de Guijarro, claro, mientras que en Montpellier serían Miguel Torres y Diego Medina los encargados de anotar los primeros tantos.
Y de ahí, a un magistral parcial (2-13) de los chicos de Leandro Bautista, que obligaron a parar el encuentro al técnico local, Santiago Suárez, en pleno festival de los mosqueteros. Lo frenaron algo un poco espoleados por el animoso público local, pero al final del primer cuarto el marcador estaba claramente desnivelado: 10-19. Claro está, al final de los 8 primeros minutos, Carlos Crespo ya destacaba (12 puntos, 16 de valoración y un más/menos de 9 de su equipo con él en pista, ya que aún no había descansado).
Segundo cuarto; la distancia sigue creciendo
Acabaría Crespo el encuentro con unos extraordinarios 32 puntos y 36 de valoración, pasando algo menos de 7 minutos en total en el banco tomando aire. Uno de sus respiros se produjo con la máxima visitante (12-26) en el minuto 10 de encuentro, que también tendría otro 14-28 poco después.
Y aunque el electrónico se movería poco al llegar al paso por los vestuarios del extraordinario colegio Newman (21-33) lo cierto es que los locales ya tenían otra cara. Habían encontrado la manera de competir, y de frenar el extraordinario ritmo visitante que le había dado muchos puntos en los primeros segundos de cada posesión. Y además, estaban consiguiendo que cerca de los aros, la potencia imparable de Diego Guijarro (33 puntos, 8 rebotes y 46 de valoración) comenzara a encontrar rendimiento.
Tercer cuarto; Newman se lo cree
Si algo tenía conseguir el conjunto convidante para verse con opciones de llevarse la primera ronda era dominar en el lugar donde no lo había hecho hasta el momento: la defensa. Y empezaron a ver que podía ser posible en los terceros 8 minutos. Y es que Montpellier anotó menos de un punto por minuto (7) y veía como llegaba al último cuarto con sólo la mitad de la renta (34-40).
De hecho, el técnico visitante se vio obligado a parar el encuentro al poco de volver del descanso (5:29) ya que habían pasado ya dos minutos y medio sin que su equipo encontrara el camino del aro. Por aquel entonces, la distancia ya estaba por debajo de los 10 de diferencia (24-33) aunque David Quevedo consiguió calmar los ánimos locales con una efectiva canasta, y aunque Daniel Corral volvía a encender a la afición de Newman, Crespo apareció para seguir manteniendo la distancia... hasta que un inoportuno tirón muscular provocó que tuviera que parar momentáneamente.
Último cuarto; los locales reman... y mueren en la orilla
Una inesperada lesión que encendió la ilusión de Newman, que se vio con todas las opciones posibles de llevarse la victoria. De hecho, a menos de cuatro minutos para el final del encuentro, sólo estaban a una posesión (42-45), que incluso tuvieron en sus manos, pero no consiguieron culminar.
Las remontadas hay que completarlas... y pagaron los locales no hacerlo. Era el momento del poder a poder con Gredos San Diego Moratalaz esperando rival para la segunda ronda. Todo estaba tremendamente equilibrado en estadísticas, incluido el poco acierto exterior (los locales por lo poco que tiraron de tres, 1/3, y los visitantes, por lo mucho que fallaron, 2/21) y era tiempo de killers.
Y apareció Carlos Crespo, que pudo más que el buen hacer de su buen amigo y rival Diego Guijarro. El impresionante 2+1 en carrera del pequeño pero inteligente y recuperado de la lesión playmaker marcó la distancia definitiva. Y aunque Newman no se rindió, el destino estaba escrito. Dos héroes lo habían intentando para sus escuelas... pero el destino sólo estaba escrito para uno.
Redacción. Hace 5 meses
Redacción. Hace 5 meses
Redacción. Hace 5 meses
Todos los jueves nuestro programa en YouTube de entrevistas y reportajes con Nacho Bonilla y Sergio García Muñoz. No te lo pierdas!
Gracias a Wibo cada colegio de la Copa Colegial puede tener su equipación completamente personalizada
Un programa para que puedas apoyar, colaborar y ayudar a la durabilidad de un proyecto deportivo y educativo único.