Tras el encuentro femenino, daba comienzo la segunda jornada de las Series Copa Colegial en la competición de los chicos. Los jugadores del colegio fuenlabreño de NILE ya estaban entonados tras haber animado previamente a sus compañeras, y tenían ganas de poder repetir la hazaña y completar la jornada perfecta. Pero enfrente estaban unos Flamencos que, además de contar con la ventaja de campo, también venían con mucha ambición tras haber perdido la semana pasada en la primera jornada de las Series.
En este caso no hubo tiempo para presentaciones ni dilaciones, y rápidamente tras el calentamiento comenzó la acción.
Primer cuarto: COIN busca resolver el partido con su rodillo inicial
Los locales empezaron muy fuertes, con un quinteto inicial dotado de una velocidad, agilidad y versatilidad que no iba a encontrar mucha respuesta entre los titulares de NILE. Los anfitriones, buscando correr y aprovechar su velocidad, impusieron un tempranero ritmo vertiginoso de arriba a abajo que ya les permitió alejarse en el marcador.
Para intentar frenar este arreón inicial, el entrenador de los visitantes planteó una defensa en zona que trabase la fluidez de los Flamencos, pero los contraataques generados por sus pérdidas en ataque se transformaron en sencillas bandejas para muchos de los jugadores de COIN. El tanteo era de 16-4 al terminar este primer asalto.
Segundo cuarto: los faraones se centran y COIN no consigue ampliar la ventaja
Bajo los gritos de "¡Dale COIN! ¡Dale COIN! ¡Dale COIN!, los aficionados locales buscaban alimentar el buen momento de sus jugadores. Y la velocidad e intensidad de Sergio Landrove les recompensó con un meritorio robo de balón y un frenético coast-to-coast que culminó con un plástico 2+1.
NILE intentaba jugar diferentes cartas, alternando diferentes estilos entre jugada y jugada: juego en estático, muchos pases, tiros abiertos, o incluso mediante jugadas más individualistas tras bote... Pero no conseguían ver aro. Además, en uno de esos momentos, Guillermo Elvira le colocó un gorro tremendo a uno de sus rivales, y segundos después él mismo convertía una bandeja fácil al contraataque que celebró con los puños en alto y alentando a la grada.
La renta se agrandaba en cada jugada, y los Faraones tuvieron que pedir un tiempo muerto para aclarar ideas y motivar a sus jugadores. Eso sí, nada más salir de este minuto, David Ruiz conseguía un tirito a tabla y un triple en la siguiente jugada. Parecía que les había sentado bien la charla.
Justo cuando NILE entraba en ritmo, otro jugadón de Guillermo Elvira (que se veía recompensado con un tiro libre adicional) ponía las cosas en su sitio. ¡Menudo intercambio! Instantes después, los jugadores visitantes lograron anotar en tres posesiones consecutivas. Estaban mejorando claramente su actuación, pero el problema persistía en sus líneas defensivas.
Con el partido completamente enloquecido y con mucho desacierto (causado por el enorme despliegue físico), una falta antideportiva de COIN permitió a los faraones recortar mínimamente en el marcador: 28-15 antes del paso por los vestuarios.
Tercer cuarto: los Flamencos logran su mayor renta
Los jugadores entrenados por Leyre Arias abrieron el marcador tras adueñarse de 4 rebotes ofensivos en la primera jugada. No tenía pinta de que fuesen a conformarse con la amplitud de esa ventaja. ¡Querían más! Mientras los puntos de NILE llegaban con cuentagotas, los de verde conseguían elaboradas triangulaciones que involucraban a todos los jugadores en pista. Estos jugadores otorgaron minutos de pleno disfrute baloncestístico.
A mediados del cuarto, Javier García nos deleitó con una canasta de oficio en un precioso euro-step que finalizó a pesar del contacto. Pero justo en pleno parcial visitante, Guillermo Elvira se elevó para colocar otro tapón descomunal que enviaba el balón fuera de banda y amedrentaba a los Faraones.
En los últimos minutos del período, David Cilleruelo se hizo dueño y señor de la pintura, y la ventaja de COIN se vio ampliamente incrementada gracias a los 10 puntos de éste en el cuarto. Un jugador de NILE logró anotar un triple que les metiese un poco en el partido, pero el árbitro lo marcó fuera de tiempo y nos fuimos al último tramo con un marcador de 46-23.
Cuarto cuarto: la garra y el dominio de Rubén Zuil no fue suficiente como para remontar
Nada más ponerse el balón en juego, los visitantes se encomendaban a su cadete de primer año, Rubén Zuil, que con un meritorio gancho a tablero y un lanzamiento de 5-6 metros sacaba aplausos de las manos de aficionados de ambos bandos.
Sin embargo, justo en ese momento, un bombeadísimo triple que cayó con nieve por parte de Juan Carro levantó a la grada local, que empezaron a corear su nombre sin parar. Era una fiesta. Además, Sergio Landrove, que no tenía freno y continuaba defendiendo como si fuese su equipo el que fuese por debajo en el electrónico, también aportaba su granito de arena en ataque.
Una preciosa jugada con un espectacular dribbling de Javier García dejó solo bajo el aro a su compañero Rubén Zuil para dos puntos fáciles. En ese momento, NILE volvió a recordar que esta era su mejor arma, y durante los siguientes ataques volvió a acudir a su poderío en la zona (nada más y nada menos que 12 puntos para él en este último cuarto).
Por parte de los Flamencos, Guillermo Elvira se las apañó para volver a poner otro soberbio taponazo que generase un contraataque que él mismo finalizaría, y la afición se volvía loca. ¿Cuántas veces había hecho esa misma acción? Sin duda sus largos brazos son su seña de identidad.
A Rubén Zuil le sentaron en el banquillo con una sonora ovación, pues había dado la cara en un partido muy complicado para el colegio NILE. Pero a pesar de su tardío dominio, los Flamencos volvían a la carga, y Pablo Garay cerraba el partido con un triplazo que ponía el broche de oro y el 60-40 en el tanteo final.
Como mención especial entre los anfitriones, nombrar a David Cilleruelo, que evitó que NILE saliese del pabellón con un doblete (pues las chicas sí consiguieron la victoria a domicilio) gracias a sus 17 puntos.
