En el partido de cuartos de final de la Copa Colegial que enfrentó al IES Profesor Máximo Trueba y a Escolapios de Pozuelo se notó la necesidad de mantener la mente en el partido y muchos se dieron cuenta de cómo condiciona la grada a los jugadores. 

Escolapios se vio arrastrado por el mal ambiente causado por su afición en la grada, lo cual les condicionó gran parte del partido y Máximo Trueba supo mantener la cabeza fría y un alto nivel de juego. Tras la presentación de los equipos, todos se saludaron en la pista, una gran muestra del respeto y la deportividad que existe entre los jugadores en este bonito deporte. 

Primer cuarto: El comienzo de un largo partido (17-12)

El encuentro empezó con mucha intensidad desde el primer minuto cuando Daniel Vázquez abrió el marcador a favor de Escolapios y dos minutos después comenzaría el espectáculo de Álvaro Gómez para poner por delante a Máximo Trueba. El partido estuvo igualado desde el inicio pero todavía no sabíamos que íbamos a disfrutar de una auténtica exhibición por parte de ambos equipos. 

A mitad del primer periodo, saltó a la vista Pablo de la Iglesia, un nombre difícil de olvidar en todo lo que quedaba de partido, MVP merecido de Escolapios y que estaba dispuesto a dejarlo todo para no quedarse atrás, su intensidad y fuerza en ataque hizo que Máximo Trueba mantuviera encendidas las alarmas. Álvaro Sánches fue durante todo el partido un factor clave, el 5 de Máximo Trueba desató calidad en cada jugada. 

Segundo cuarto: Un marcador muy empatado (35-33)

Máximo Trueba salió con la dupla perfecta, Paúl Dominguez y Álvaro Gómez eran pura calidad en la pista y juntos llevaban al equipo a lo más alto siendo los únicos que marcaron en este segundo cuarto. A pesar de ello, en el intento de pararles los pies, Pablo de la Iglesia anotó tres triples a favor de Escolapios, los cuales mantuvieron el partido igualado. 

Miguel González y Andrés Lanuza fueron esenciales para que Escolapios no se alejara en el marcador. La intensidad de ambos equipos cada vez era más notable y en el ambiente en los banquillos se notaba la presión de un partido importante en el que ningún equipo conseguía irse en el marcador. 

Tercer cuarto: El comienzo de las complicaciones (53-30)

Después de un descanso bastante tenso, ambos equipos salieron a la cancha dispuestos a dar lo mejor de sí mismos. En este encuentro los triples llegaban de tres en tres y en este periodo, era el turno de Mario Alcalde-Moraño que anotó nueve puntos para Máximo Trueba, lo cual les ayudó a alejarse de Escolapios. 

Aun así, Pablo de la Iglesia estaba a la cabeza en cada jugada de Escolapios y mantenía su esfuerzo en no alejarse en el marcador y mantenerse dentro del partido y aunque ahora le fue más difícil, el trabajo en equipo y la velocidad le fueron de gran ayuda. 

Último cuarto: Un ejemplo de humildad (68-64)

El último periodo del partido que daría el pase a uno de los dos equipos a semifinales de la Copa Colegial se torció a medida que la grada más joven de Escolapios se iba alterando y con ello, sus jugadores. 

Siempre se dice que la afición es uno de los mayores apoyos para los jugadores en un partido difícil, pero para los chicos de Escolapios no fue así, todo lo contrario, una afición que dejó mucho que desear fue un lastre para el equipo y así lo expresaron algunos de sus jugadores avergonzados por la difícil situación que se vivió ante las faltas de respeto que se escucharon desde una zona de la grada. 

Cabe destacar la ejemplaridad tanto de los jugadores de Escolapios como de su entrenador, Pablo Ardila ante una situación complicada con su afición que acabó expulsada por decisión de los árbitros ante los insultos y gestos expresados que no se deben tolerar en ningún ámbito ni mucho menos en el deportivo. El respeto y la humildad que presentaron ambos equipos entre ellos al comienzo del partido se mantuvo hasta el último minuto. 

Miguel González y Pablo de la Iglesia lo dieron todo para intentar remontar el partido, y casi lo consiguieron, tan solo se quedaron a cuatro puntos del pase a semifinales de la Copa Colegial, una situación que podría haber sido distinta sino hubiese sido por el conflicto en la grada. A pesar de ello, todos los jugadores fueron un gran ejemplo de deportividad y humildad. 

Escolapios tuvo una situación difícil que le complicó jugar su propio partido y estuvo condicionado por el ambiente los últimos minutos que fueron más que importantes. Profesor Máximo Trueba se llevó un partido espléndido de todos sus jugadores que celebraron orgullosos junto a su grada el triunfo y el pase a semifinales.