Los Tigres IES Miguel Catalán ya están en semifinales en el año de su estreno en la Copa Colegial Zaragoza. Un gran partido que enfrentaba a dos equipos muy consolidados, les llevó a la siguiente ronda tras vencer, con muchas dificultades a unos Rinos que dieron la cara hasta el final.

Primer cuarto: dos equipos a por todas

El primer cuarto fue muy igualado, en un anticipo de lo que sería todo el encuento. Si los Tigres aprovechaban su mayor físico para dominar el juego interior, Romareda no caía en la trampa y hacía de su acierto desde el exterior una fuente inagotable de puntuación, con un José Fau que traía de cabeza a sus defensores. El 16-16 que reflejaba el marcador era sinónimo de lo parejos que estaban ambos conjuntos, además de la buena mano con la que habían comenzado los primeros ocho minutos.

Segundo cuarto: espectáculo anotador

Romareda empieza fuerte el segundo cuarto, con Fau enchufado al máximo e incontestable en el lanzamiento desde fuera. El capitán de los Tigres, Pablo Soriano, tomaba las riendas del equipo y aportaba galones, quizás no con demasiado acierto de cara a canasta pero sí con una determinación que empuejaba a los suyos a no desesperarse y seguir remando para que las distancias apenas fueran importantes en favor de uno u otro equipo. Tanto es así que, a falta de dos minutos, los visitantes consiguen una renta máxima de 7 puntos merced a un triple de Alejandro Vicente, otro de los destacados, que parecía abrir brecha en el tanteador. Nada más lejos de la realidad porque, en el último minuto, cinco puntos consecutivos de Rinos, con triple final incluido (como no) de Fau, ponían un 29-32 que dejaba todo pendiente para la segunda parte.

Tercer cuarto: un duelo de poder a poder

Pocas cosas cambian tras el descanso. Nadie quiere dar el brazo a torcer porque hay mucho en juego. Esto es la Copa Colegial: dos grandes equipos pero, el que pierde se va para casa, cada partido es una final. Y así se lo toman los dos equipos. Y a lo grande. Las muñecas no se encogen, los puntos fluyen en una y otra canasta, tres triples para Rinos, dos para los Tigres y, las diferencias, apenas se mueven: dos puntos arriba para los de Miguel Catalán a falta de los ochos minutos decisivos (46-48).

Último cuarto: un minuto final que decide todo

Romareda es un equipo joven, pero sale con mucha ambición dispuestos a cerrar el partido y que la victoria quede en casa ante una grada que ha ido llenándose conforme pasaban los minutos. La expectación es ya máxima a estas alturas y, la casta de Iván Júdez, bien acompañado por los acertados García y Biel, ponen a los Rinos por delante tras muchos minutos de ir a remolque de su rival. 54-50 para encarar los cinco minutos finales. Pero los Tigres gozan de más experiencia que sus contrarios y no se ponen nerviosos por verse por detrás en el marcador. , anotando sin prisas, pero también sin pausas, dándole la vuelta al resultado con gran eficacia. Pero Romareda tmpoco se rinde. Cinco puntos de Fau les dan vida pese al arreón de Miguel Catalán para entrar en el último minuto con un 61-62 que denotaba la igualdad existente. Alexandrovitch anotaba para poner 3 arriba a los Tigres 61-64 y, a partir de ahí, Romareda es víctima de la férrea defensa visitante, que no les permite volver a anotar hasta el final. Pese a los intentos finales de alargar la vida mediante faltas personales, el acierto de Menéndez y Soriano amplía la ventaja para que los Tigres pasen a semifinales con un 61-67 muy reñido y que sirvió para que los espectadores que presenciaban el partido disfrutaran de un gran duelo. Los Hipos de Compañía de María les esperan en el escalón anterior a la Gran Final el próximo día 8 de marzo.