El viaje a Malta de las chicas de Christian Sainz y Carolina López no empaña la 2ª parte de un partido que tuvo que ser jugado en dos partes por culpa de la lluvia. A Isaac Albéniz se le atraganta la intensísima defensa de las pías. Brutal Jana Rebollo: 20 puntos
“Ubuntu” es una regla ética o filosofía sudafricana enfocada a la lealtad con las personas y a su manera de relacionarse. La palabra proviene de las lenguas Zulú y Xhosa. Surge del dicho popular «Umuntu, nigumuntu, nagumuntu» que en Zulú significa «una persona es una persona a causa de los demás». Este era el grito de guerra de EPSA femenino en el partido que enfrentaba a las jugadoras de Sant Antoni contra las de Isaac Albéniz. Un grito que las llevaría a ganar su primer partido en la historia de la Copa Colegial. Bonito lema para un bonito partido dividido en dos partes. Trabado por la lluvia, el choque empezaba en jueves 23 de febrero y terminaba en jueves 2 de marzo, convirtiéndose así en el partido más largo de la Copa Colegial Barcelona.
23 de febrero – La lluvia empaña un partido igualadísimo
Era día de EPSAmen en la Escola Pia Sant Antoni. El reloj marcaba las seis y cinco de la tarde y el choque colegial entre las pías e Isaac Albéniz comenzaba con las primeras gotas de lluvia. La organización llegaba con taxi para inaugurar el 2º partido en el que se celebraba el 10º aniversario de la Copa Colegial Barcelona tras el acto del lunes en European School. Multitud de sponsors, lonas, golfbanners y un detalle muy especial, dos globos dorados con los números 1 y 0, formando el 10 que lleva en tinta grabado esta edición de la Copa Colegial. Una imagen de postal con el que se daba el pistoletazo de salida a un choque con la huella de ‘El Plantel TV’.
Ahora sí, el cielo no es que estuviera gris, sino directamente negro. Mala pinta y las peores previsiones: se avecinaba chubasco. Aunque chubasco -de puntos- es lo que comenzaba haciendo ahora la escuela visitante. Este año de rojo, las jugadoras badalonesas comenzaban dominando y pasando el rodillo en los primeros seis minutos. Su buena defensa, que anulaba a las jugadoras pías, estaba funcionando. Lucía Mallenco y Àngela marcaban un parcial redondo de 0-8. Un parcial que no tardaría EPSA en frenar. Cuando la pelota le llegaba a Jana Rebollo, el peligro se olía en las filas de Albéniz. Ella sola tiraba del carro del equipo y el marcador ya era otra cosa. Siete a diez (min 7)… ¡y otra recuperación más básquet de Rebollo! Tremenda esta brillante jugadora, casi tan buena como Laia Palau. Estaba on fire: llevaba un pleno al 9 en el primer cuarto, que terminaba con 9 a 10. La primera pregunta del EPSAmen, resuelta.
A la vuelta, tiros libres BIE e instrucciones desde el banquillo de Christian Sainz y Carolina López, dos ex claretianos que ahora lo daban todo para Sant Antoni. Sainz, de hecho, ya había ganado en este mismo patio como entrenador de las lobas claretianas hace justo un año en el 2º partido de la Copa Colegial Barcelona 2022. Hoy, defendía los colores amarillos: bravo. Sus ideas tácticas permitían a las pías recuperar el balance ataque-defensa que tanto había fallado hasta el minuto 5. Ahora eran un muro, a la vez que Rebollo ya se ponía en dos dígitos. Encesto tras nuevo robo a lo Pepe Sánchez y 11-13 (min 11). “Seguimos, seguimos, seguimos”, indicaba Sainz a sus pupilas. Estaban ahora llevando la batuta ante la precipitación de Isaac Albéniz, que entraba en depresión. Desconcentración máxima y tres pérdidas seguidas agravaban la situación. Lo nunca visto en la Copa Colegial: 3 canastas seguidas de EPSA en 6 segundos (Sonia López, Gemma Tarrida y la incombustible Rebollo) le daban la vuelta al electrónico. EPSA ya estaba por delante (17-15, min 13) y Sainz demostraba sus dotes técnicas pidiendo un timeout, a priori no necesario pero, bien analizado, sí. “Es un tiempo muerto que si no lo perdía, se nota que EPSA tiene un muy buen entrenador. Sabe mucho”, exclamaba David Aguado ante las cámaras de ’El Plantel TV’. Un Plantel que seguía atento cada jugada con la excelsa narración de Miki Núñez, Alvaro Ros, Sergi Morcillo y Nicolás Suñé, que no soñaba, sino que veía una edición más cumplirse su sueño colegial. Un sueño que también tenían los dos coles del patio hoy: avanzar de ronda y seguir proyectando el camino al estandarte. Para ello tendrían que excelir en la segunda mitad, porque la primera acababa pareja. Diecinueve iguales.
A continuación, actuaciones musicales de Mustafá y Bloodson, que interpretaban unos temazos de rap que levantaban al público antes de que vari@s alumn@s y ex alumn@s participasen en un improvisado concurso de triples con regalo final. Era Greta la que se llevaba el obsequio colegial: una camiseta de la Copa y dos detalles con el sello de EPSA. ¡Grande!
Aunque por A o por B, y justo tras haber acabado la canción Bloodson y Mustafá, se ponía a llover de mala manera, “a bots i barrals”… Las gotas de lluvia embarraban el patio y lo volvían resbaloso. El equipo arbitral, con Juan Andrés (antes de lesionarse) y Sofia Lagomazzini al frente, decidía suspender el partido hasta próximo aviso, aun y los intentos del público de secar la pista con papeles de periódico. La fecha acordada por ambos colegios era la siguiente: justo al cabo de una semana. El jueves día 2 de marzo a las seis de la tarde se reinauguraría el partido femenino de dieciseisavos con un empate técnico y numérico.
2 de marzo – EPSA hace historia
Por primera vez en la historia de la Copa Colegial Barcelona, un partido “empezaba” con tiros libres BIE. Ahora, el tiempo acompañaba, la lluvia no aparecía y a ESPA parecía haberle sentado bien su viaje por Malta después de comer deliciosos timpanas en La Valetta, el plato típico del país compuesto por macarrones e hígado de cerdo.
La presión defensiva, gracias a las órdenes de Sainz y López, surgía efecto de nuevo de buenas a primeras y Rebollo enchufaba de tres. El frío marcaba los siguientes compases y el ya de por sí resbaladizo patio de las amarillas ponía a EPSA con un +5 en el luminoso. Isaac Albéniz tenía ahora toda la presión encima: los chicos venían de palmar en Països Catalans ante La Llauna y las féminas tenían que ganar sí o sí. Como fuera, si hacía falta haciendo lucha grecorromana al más puro estilo Kaori Icho. La verdad es que no lo tendrían fácil: pues aunque solo tenían que jugar dieciséis minutos, iban faltas de fondo de armario. Solo seis jugadoras podían acudir al partido y, de momento, pagaban el pato en los primeros 480 segundos: 28-26. EPSA, más cerca de su primera victoria colegial histórica al fin del 3º periodo.
El frío seguía helando pies, manos y orejas de todos los aficionados en este spin-off del partido de hace una semana. Una helada, la cual no la notaban las jugadoras de ambas escuadras, que empezaban a proyectar una partida de ajedrez en la que Sant Antoni tiraba más y mejores diagonales. Sus alfiles Rebollo y Ester López dominaban la botella, a la vez que Ainhoa Ortuño, de Isaac Albéniz, ejercía como caballo ganador visitante. Triplazo y partido muy reñido, nuevamente. Treinta y cinco a treinta (min 29) y el crono corriendo como nunca. Timeout y a seguir sufriendo las chicas de Isaac Albéniz, que al reiniciar no atinaban desde la línea de tres. Menos seis y nueva errada, ahora de Àngela Redondo. EPSA lo tenía en la mano y ahora no perdía la oportunidad: la buena pizarra del cuerpo técnico y la garra de las players habían, por fin, surgido efecto. Sant Antoni lograba así su primera victoria de la historia de la Copa Colegial, el grito de “Ubuntu” sonaba más fuerte que nunca: ¡enhorabuena!
Isaac Albéniz regresará el año que viene, con chicos y chicas, y con más ganas que nunca. Este año han perdido a las primeras de cambio, pero la experiencia colegial siempre vale la pena. ¡Gracias por ser parte de nosotros, también! Au prochaine!
Jana Rebollo (EPSA) e Irene Zapata (Isaac Albéniz) eran elegidas MVP’s del partido.
