IPSI se lleva el duelo contra Sant Ignasi. Anna López y Leire Franquesa, decisivas

El verde parqué de la escuela IPSI recibía con holgura a los dos equipos que abrían la 8ª semana de la Copa Colegial 2019. Las chicas de Sant Ignasi y las del propio IPSI saltaban a la pista sabiendo que se tendrían que poner el mono de trabajo desde un buen principio y no deberían quitárselo en ningún momento del choque si se querían estar en la antepenúltima ronda de la competición, los cuartos de final.

Arriba y abajo empezaba el partido. Mucho movimiento de balón y múltiples corredizas marcaban el inicio de cuarto. Un comienzo que empezaba liderando, con especial acierto bajo el aro, la escuela Sant Ignasi de Sarrià. Sara Amorós y la pívot de 1’82 metros Blanca Chasco, ponían rápidamente un contundente parcial de 0 a 7 en el marcador. Sin embargo, este parcial no demostraba lo que estaba pasando verdaderamente en el terreno de juego, ya que IPSI estaba forjando también buenas jugadas. Y para esto imponían justicia Júlia Gibert y Leire Franquesa. Ambas jugadoras habían sido claves en el debut de IPSI en la prestigiosa competición, y ahora se encargaban de rebufar a su escuadra y remontar el parcial inicial. Con un encesto a tablero de Anna López, IPSI ya estaba por delante (8-7, min 5). La dupla Gibert-López se sentía como pez en el agua e IPSI se deshacía de la soga al cuello impuesta por Sant Ignasi en los instantes iniciales. La escuela anfitriona estaba siendo ahora la dueña y señora del partido y solo los kamikazes arreones de Blanca Chasco estaban haciéndole daño a IPSI. Un fortuito -pero a la vez desafortunado- golpe en el ojo de Chasco hacía que esta se tuviera que retirar del partido momentáneamente. “Veo doble”, se quejaba la jugadora más alta de Sant Ignasi antes de sentarse en el banquillo para comprobar como su team se iba al receso entre cuartos dos abajo (15-13).

Tras el igualado primer cuarto, el baloncesto volvía a la cancha. Y lo hacía con los famosos y conocidos tiros libres. En esta ocasión, Sant Ignasi aprovecharía los dos e IPSI se mostraría errático en ambos. Un error que se perpetuaría durante los siguientes minutos en ambos bandos: Sant Ignasi cruzaba demasiado rápido la cancha para tirar desde cualquier posición e IPSI denotaba inestabilidad e intranquilidad en el tiro. No obstante, allí estaba Inés Sanz para ser la excepción a la regla y liderar un parcial de 0 a 4 que volvía a poner a Sant Ignasi por delante (15-19, min 11). Sant Ignasi volvía a sentirse cómodo, ahora con el partido ya estabilizado y, rebozado de faltas, veía a IPSI por el retrovisor por segunda vez en el match. IPSI, por eso, no se desenchufaba del partido y volvía a igualar a Sant Ignasi tras un par de fantásticas acciones de Anna López. Los dos equipos, además de mostrarse fallones e indecisos en el tiro en este segundo acto, también dudaban mucho en la acción del pase, y este era el factor desencadenante para convertir el duelo en un batiburrillo de contraataques. Tras dos tiempos muertos casi consecutivos, el partido volvía a animarse y el tanteo subía al definitivo 24 a 24 con el que terminaba la primera parte.

Una Blanca Chasco ya recuperada de su golpe era el quebradero de cabeza de IPSI en este tercer periodo. El dominio en el rebote ofensivo junto a su facilidad y buena visión de juego para forzar faltas, ponían por delante de nuevo a Sant Ignasi en el luminoso (27-32, min 18). “¡Defendemos!”, jaleaba el coach visitante, visiblemente irritado. Y es que cuando sus chicas se ponían por delante, IPSI reaccionaba de manera impoluta y casi inmediata: dos buenas jugadas de Gibert y Laura Farré catapultaban de nuevo a IPSI para igualar el choque por enésima vez. El empate, la igualdad y las mínimas diferencias estaban siendo la clave de este duelo tan igualado, que parecía que se acabaría resolviendo en el tramo final. El toma y daca era constante: Franquesa anotaba, pero Sanz le devolvía la jugada. No había cese. Todo se acabaría decidiendo al final, los 8 últimos minutos acabarían siendo decisivos tras el 38-38 que imperaba en el electrónico.

LA X de empate había sido protagonista en dos de los tres cuartos y nada hacía pensar que no lo sería en este. Nadie descartaba la prórroga ante un escenario tan parejo. En este último cuarto, nervio y nervios. Tensión, pero también mucha imprecisión, una vez más en el pase, lo que provocaba situaciones de descontrol y multitud de faltas cometidas por parte de ambos equipos. Extraño era que ninguna jugadora estuviera expulsada por acumulación de faltas hasta el momento, pero bien cierto era que algunas de ellas empezaban a estar saturadas en este apartado. En cuanto al resultado, en el minuto 28 seguía reinando la igualdad (40 iguales, como en el tenis), pero una vez más Júlia Gibert y Franquesa tiraban del carro para lanzar a IPSI y cosechar su máximo colchón en el marcador (46-40, min 29). Ante esto, Sant Ignasi no se rendía y su míster enchufaba a las jugadoras aplaudiéndolas. Voltear el tanteo aún era posible. Pero Anna López se encargaría rápidamente de decirle a Ernest Parera, el entrenador visitante, que dejara de soñar. Y se lo decía tras meter una canasta de quilates que servía para finiquitar de una vez por todas este partido. Aunque Sant Ignasi lo volvía a probar, las locales ya habían sentenciado. IPSI había desequilibrado la balanza en este último cuarto. Las “Llangardaixos” estarán en cuartos tras imponerse 49 a 47.

Blanca Chasco (Sant Ignasi Sarrià) y Jana Cesari (IPSI) fueron escogidas MVP’s del partido.