Irlandesas dominó de principio a fin en el debut en cancha de Maravillas para asaltar la colmena de las Abejorras y pasar por  ronda en  la Copa Colegial.

La Colmena de  Maravillas se tiñó más que nunca de amarillo y negro, con cheerleaders y  Abejo, el  mascota-speaker presentando a las jugadoras de ambos equipos. Pero el verde irish también tomó parte de la colmena: se desplazó un autobús entero.

Irlandesas toma el mando 
La base Carla Dietta y la ala-pívot Eva Gómez fueron las encargadas de dar motivos para justificar el desplazamiento de la hinchada visitante. Entre las dos anotaron los 10 puntos del parcial de salida de Irlandesas que obligó a coach Lizaur a pedir tiempo muerto mediado el primer cuarto: 2-10.

Pero aunque Maravillas pareció reaccionar, la defensa individual de las verdes se atragantó a las de casa. Así, el primer periodo acabó con un claro 5-20.

Sin relax
No se relajaron pese a la ventaja, e Irlandesas continuó apostando por presionar en defensa para desde ahí construir el ataque. Sin embargo, todo el dominio visitante en defensa y rebote no se refeljó en el marcador: la pólvora verde parecía haberse mojado y no entraban los tiros.

Sin embargo, las abejorras no aprovechaban esta sequía visitante para asestar un aguijonazo al partido. Tras el 5-22 inicial, nos pasamos tres minutos y medio sin que ninguno de los dos equipos lograra encontrar aro.

…y quienes lo encontraron fueron Irlandesas (5-25 a 3:37 para el descanso). Sin embargo, el Fondo Amarillo de Maravillas no quiso que el encuentro fuera un entierro. ¡Esto es la Copa Colegial, la fiesta del baloncesto! Escuchando los cánticos… ¡quién diría que animaban a las que iban 20 abajo!

Fiesta en la grada
Cómo se celebró en la colmena abejorra el canastón al contraataque de la base Clara de Carlos que ponía el 7-31 era una buena muestra de lo que es esta bendita locura llamada Copa Colegial. Así las cosas, al descanso lucía en el electrónico un claro 7-35.

 Abejo se encargó de amenizar el descanso con chistes, tras la danza de las animadoras, sacando las sonrisas a todos los presentes, cuerpo arbitral incluido. Hay clásicos como los chistes de “camarero, ¿qué?” que sobreviven en la era de los millenials.

En el parqué quien no lograba la supervivencia era Maravillas. No por falta de intensidad – se retiró tras un golpe al caer al suelo en una defensa la escolta Leire Barturen- sino porque la diferencia era demasiado grande e Irlandesas no dejaba de sumar. 9-41 mediado el cuarto.

Las abejorras encontraron algo de fluidez ofensiva anotando más en esos últimos 4 minutos del tercer cuarto que en el resto del partido: parcial 8-7 que ponía el marcador en un desigual 15-48 para entrar al último periodo.

Con el partido totalmente roto, ya sólo faltaba seguir respetando a nuestro deporte sin bajar intensidad, sin regalar ningún balón y sin dejar de disfrutar pese a la diferencia.

“Campeonas oe” cantaban las más pequeñas de las hinchas de Irlandesas. “Sí se puede” respondían, no sin ironía, desde el Fondo Amarillo. La garra que le ponían las suyas parecía la de un partido por decidir, no el de uno en el que vas 40 abajo. Pero el marcador no miente:al final aunque redujeron diferencias fue un claro 31-63 que suponía la primera vez que Irlandesas pasa de fase en Copa Colegial